Desde la poltrona, una visión crítica del 2015

 Hoy estado sentado en mi poltrona, disfrutando un café caliente, me decidí a escribir esta última entrega del año a pocas hora de su fin, llueve suavemente y se escuchan las gotas sobre la ventana, con clima de montaña, en amaneceres sin amanecer. No quiero enumerar los bueno y lo malo del año que ya nos deja, no es la intención y mucho menos lo bueno y lo malo que hice o deje de hacer, un día perdido es irrecuperable, si tomamos en cuenta que el hombre viva en promedio ochenta (80) años, equivalentes a cuatro mil ciento sesenta (4.160) semanas o veintiocho mil ochocientos días (28.800), pienso y considero que tenemos tiempo suficiente para realizar nuestros proyectos, alcanzar nuestras metas, lograr todo lo que queremos en la vida, eso es nuestro mayor tesoro nuestro de vida, una año más de vida o un año menos, es cuestión de perspectiva.