El engaño imperialista de los derechos humanos.

         Desde tiempos inmemoriales y según el enfoque de los gobernantes de turno en cualquier país del mundo y envuelto en la coyuntura internacional, uno tras el otro de los gobiernos de los Estados Unidos han utilizado como herramienta a través del tiempo el discurso de la democracia y los derechos humanos para justificar las injerencias en los asuntos internos de los países de América Latina y el Caribe. La historia del siglo XX en América Latina y el Caribe, es la historia del surgimiento, lucha y consolidación del Imperialismo estadounidense, para convertirse en una potencia hegemonía mundial más poderosa y agresiva jamás conocida en la humanidad. En 1776 los colonos ingleses, galeses, escoceses e irlandeses se daban la “Declaración de los Deberes y Derechos del Hombre”. En 1846 los EEUU decidió apoderarse de parte del territorio mexicano, actualmente Texas, Nuevo México, Arizona y California, en 1852 los marines desembarca en Buenos Aires, en 1895 en Cuba, en 1898 en Cuba y Puerto Rico, en 1905 en República Dominicana, de 1906 a 1909 Cuba ocupada por el General Charles Magoon entre otras. La doctrina Moore expuso “Doctrina de América para los americanos”.

Somos un faro para América Latina y el Mundo

Un hecho democrático de dimensión histórica culminó el 14 de marzo de 2008 en nuestro país: la fundación del Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV). Quien tenga dudas sinceras sobre la naturaleza y el rumbo de la Revolución Bolivariana, encontrará en este acontecimiento una prueba inequívoca.

No hay antecedentes para un acto fundacional de estas dimensiones y de pareja participación democrática. Fue un proceso difícil que implicó convocatorias a decenas de miles de promotores, la inscripción como aspirantes a militantes de 5 millones 800 mil personas, la formación de los Batallones Socialistas, la elección de voceros, comisionados y finalmente 1.681 delegados que participarían en el Congreso Fundacional, instalado el 12 de enero de 2008 y el 2 de marzo de ese mismo año.

Gestión Bolivariana: La Geopolítica Internacional y el Mundo Pluripolar

El Cuarto gran objetivo histórico plasmado en el Plan Nacional Simón Bolívar, para la creación de una nueva Geopolítica Internacional, para la construcción de un mundo multipolar, que permita a Venezuela desempeñar un papel protagónico en la construcción de la unión latinoamericana y caribeña, mediante el fortalecimiento de la Alianza Bolivariana para los pueblos de Nuestra América (ALBA), en el proceso de cambios latinoamericanos y caribeños, dinamizando los nuevos espacios de acción política como la UNASUR y la CELAC.